La Sociedad Nacional de Industrias (SNI) y los gremios del sector textil-confecciones de Gamarra y de diversas regiones del país se unieron para exponer la situación del sector textil-confecciones, debido a la masiva importación de prendas de China y Bangladesh y resaltaron la necesidad de un diálogo con el Poder Ejecutivo para promover medidas que frenen el cierre de empresas y la pérdida de empleos.
El presidente de la SNI, Ing. Jesús Salazar Nishi, indicó que el año pasado, las importaciones de confecciones registraron un crecimiento de 43,5% respecto al 2019. Resaltó que China se mantiene como el principal proveedor de prendas de vestir, concentrando más del 83% del total, seguido por Bangladesh, con el 6%, y manifestó que mientras crecen los precios de las materias primas, los precios de importación de prendas como polos, pantalones y ropa interior bajan respecto al nivel prepandemia.
“Entre el 2019 y 2022, las importaciones de los productos textiles y confecciones en el Perú han crecido un 43.4%. Sin embargo, la industria nacional viene cayendo y, en el mismo período, decreció más del 2%. Esta es una muestra clara de que hay una afectación directa de las importaciones a la producción nacional”, resaltó el líder gremial.
El presidente de la SNI resaltó en conferencia de prensa que la industria de textil y confecciones genera de manera directa más de 400 mil puestos de trabajo y de manera indirecta, en la gran cadena de textil y confecciones, más de un millón de empleos, por lo que es fundamental aplicar medidas para proteger los empleos amenazados por la masiva invasión de productos de confecciones de China.
Por su parte, Susana Saldaña, presidenta de la Asociación Empresarial Gamarra Perú, comentó que la industria textil y confecciones necesita ser salvada, porque representa el puesto de trabajo de miles de mujeres y hombres. Consideró que está en riesgo casi 100 mil empresas de confecciones y cerca de 1 millón de trabajadores, mayormente mujeres.
La conferencia contó con la participación de diversos dirigentes del sector textil-confecciones de diversas partes de Lima y regiones del Perú, quienes manifestaron la necesidad de desarrollar medidas que permitan evitar la quiebra de más negocios y solicitaron un mayor apoyo por parte de las compras estatales.