- Informalidad está asociada a un inadecuado sistema de regulación.
- • Índice de rigidez laboral en el Perú creció en 15 puntos porcentuales entre 2011 y 2015 según reporte “Doing Business 2017”.
Lima, 1 de diciembre de 2016.- En el 2015, 139 mil personas en el Perú se sumaron al universo de más de 11,5 millones de peruanos que trabajan en la informalidad. Así, según cálculos de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), el año pasado se crearon más de 440 nuevos empleos informales por día en el Perú.
Como consecuencia, la informalidad actualmente alcanza al 73% del mercado laboral, con un sector especialmente vulnerable: los jóvenes, grupo en el que informalidad registra una tasa de 87% (más de 2,5 millones de jóvenes tienen un empleo informal).
Menos competitivos
Durante el último quinquenio el grado de competitividad del Perú se ha deteriorado. Uno de los factores que explica este retroceso es la creciente y elevada rigidez de la regulación laboral para crear empleo formal. Según el Foro Económico Mundial, la regulación laboral en el Perú es la octava más rígida del mundo.
Según la última investigación realizada por el Banco Mundial (BM) en el reporte “Doing Business 2017”, la mayor rigidez laboral deteriora la competitividad y promueve la creación de empleos informales sin beneficios ni derechos laborales. Así, según el BM, los países con mayor rigidez laboral son aquellos en donde existe mayor informalidad laboral.
La Sociedad Nacional de Industrias (SNI) coincidió con el BM en el sentido de que sí existe relación directa entre sobrerregulación laboral y empleo informal, la cual es verificada cuantitativamente, pues mientras el índice de rigidez laboral en el Perú creció en 15 puntos porcentuales entre 2011 y 2015, en este mismo periodo los empleos informales crecieron en 159 mil.
“Adicionalmente a las complejidades regulatorias que existen para crear puestos de trabajo formales, un elemento que contribuye a la rigidez laboral, es la frecuente y discrecional fiscalización laboral de la Sunafil, focalizada en empresas formales que no son la principal fuente de trabajo informal y aún sin contar con protocolos que minimicen la discrecionalidad de la inspección”, advirtió el gremio industrial.
Teniendo en cuenta que en esta semana se realiza la CADE cuyo tema principal es la oportunidad de desarrollo que tenemos los peruanos de cara al Bicentenario, la SNI enfatizó que es imprescindible enfrentar el problema de la informalidad laboral.
“El reto pendiente es crear empleos formales para más de 11 millones de trabajadores informales. Para ello, es esencial garantizar derechos laborales fundamentales y seguridad social; en complemento con introducir flexibilidad para la contratación laboral acorde a estándares internacionales”, puntualizó la institución.